Melbourne, es una de las ciudades más jóvenes de Australia, y por ello muestra una especial atención por el urbanismo y las zonas verdes. El visitante que llega a Melbourne no puede dejar de visitar "la arquitectura verde" que ha convertido a la ciudad en uno de los referentes a nivel internacional, sus parques y jardines.
Una de las herencias culturales que Melbourne guarda con mayor cuidado es la mansión Rippon Lea. Diseñada por Joseph Reed y construida en 1868 es una de las mansiones de estilo victoriano mejor conservadas y en las que se condensa mejor los inicios de esta ciudad.
Phillip Island representa un extraño combinado enclavado en la bahía de Port Phillip, a 140 kilómetros de distancia de Melbourne. En apenas 10 hectáreas de extensión conjuga un riquísimo parque natural, en el que además de koalas y focas podemos encontrar la rara especie del pingüino más pequeño del mundo, el pingüino azul, con el circuito del Gran Premio de Motociclismo Phillip Island.
Melbourne dispone de un gran número de instalaciones para practicar todo tipo de deportes. Los ciudadanos de esta ciudad se vanaglorian de disfrutar de una elevada calidad de vida, a la que mucho contribuye la vida sana y el deporte diario que practican sus habitantes.
El teatro más emblemático de Melbourne es el Regent Theatre, también llamado “el teatro de los sueños de Melbourne”. Este teatro fue levantado en plena crisis económica, en 1929, en la calle Collins, una de las avenidas más céntricas y transitadas de la ciudad, con un aforo de 2.162 butacas. El teatro fue inaugurado por la compañía teatral Hoyts.
Otro gran atractivo de esta cosmopolita ciudad es su río, el río Yarra, icono de Melbourne, y uno de los lugares preferidos por sus habitantes. Tal es así, que el río discurre por el centro de la ciudad, serpenteando entre sus calles como una avenida más.